La aparición de nuevas adicciones en estos últimos años están alarmando a los profesionales de la salud.
Ya no es sólo el daño psicológico que pueden ocasionar y ocasionan, sino que también están provocando daños físicos. En este post, os hablaremos de una “nueva patología” emergente en nuestros días, la llamada WHATSAPPITIS…
La llegada de las aplicaciones para chatear a través del móvil está derivando en patologías de muñeca, dedos, e incluso de cuello. “La revista científica médica ‘The Lancet’ utiliza el término ‘whatsappitis’ para referirse a la tenosinovitis por utilización excesiva de WhatsApp”.
¿Qué es la tenosivitis? Es la inflamación del revestimiento de la vaina que rodea al tendón, el cordón que une el músculo con el hueso. Sus síntomas pueden ser: Inflamación, dificultad para mover una articulación, dolor y sensibilidad alrededor de la articulación, entre otraos y su tratamiento pasaría por aliviar el dolor y reducir la inflamación. Descansar o mantener quietos los tendones afectados es esencial para la recuperación de una tenosivitis.
Volvamos a la “whatsappitis”, estos son algunos de los dolores que puede causar:
Dolor en manos, dedos y muñecas (tendinitis): Afectando sobre todo a los pulgares y sus síntomas suelen ser dolor, hinchazón y entumecimiento, que aumentan con el movimiento de los mismos. También pueden aparecer molestias en la muñeca y en los otros dedos por el hecho de sujetar el teléfono durante mucho tiempo.
Dolores en cuello y espalda: Las posturas mantenidas delante de un ordenador o con un dispositivo móvil, pueden provocar daños en la los músculos de la columna cervical y dolor en el cuello. Con el uso abusivo del móvil, la postura prolongada de flexión puede generar también tensión en los músculos con aumento de tono y hasta contractura que se transmite desde la región del cuello a la región dorsal. Si se prolonga la postura podría extenderse la tensión a la región lumbar.
Hagamos algunos cálculos….
Si calculamos cuantas horas al día aproximadamente pasamos en una misma postura, podemos hablar de entre 2 y 4 horas con la cabeza inclinada, leyendo y escribiendo en nuestros smartphones o dispositivos. ¿Dónde aparece el problema? Según un estudio publicado por el cirujano Kenneth K. Hansraj, con una inclinación de 60 grados, ejerces sobre tu cervicales una fuerza de 27 kilos. Una bomba de relojería con nombre de cuello de mensaje (podría traducirse como cuello de guasap). Una dolencia propia del siglo XXI.
Estaríamos hablando de entre 700 a 1.400 horas al año con estrés excesivo en las vertebras cervicales. La pérdida de la curvatura natural incrementa el estrés en las cervicales y puede llevar a un desgaste prematuro y a una degeneración y posiblemente cirugía. Tengamos en cuenta que esta cifra podría subir hasta las 5.000 horas en el caso de los adolescentes.
El Síndrome del Túnel Carpiano y tendinitis: Producidos por un uso constante y prolongado del móvil, tablets, Ipads. Toda actividad que obliga a una persona a realizar los mismos movimientos durante un largo período de tiempo, causa daños en tendones y nervios de las manos. Las enfermedades más comunes son la tendinitis y el síndrome del túnel carpiano. Los pulgares ahora se usan para chatear, enviar correos electrónicos, subir fotos, entre otras actividades que se han vuelto cotidianas.
Hace 10 años se analizaban los riesgos de los trabajadores por el uso excesivo de los ordenadores en las oficinas, obligándoles por ley a breves descansos y a cumplir una serie de normativas por parte de las empresas… Desde hace tres años el riesgo lo tienen el uso excesivo de móviles.
Si bien la tendinitis y el síndrome de túnel carpiano se presentaban hasta hace 10 años en adultos mayores, por el uso de ordenadores, la tendencia se centra ahora en jóvenes por el uso constante de dispositivos móviles y electrónicos.
Intentemos cumplir con algunas recomendaciones para evitar que tanto niños, como adolescentes o adultos sufran algunas de estas patologías y utilicemos o aconsejemos utilizar los dispositivos móviles siempre con “cabeza” y de forma responsable.
Aquí os dejamos algunas recomendaciones a tener en cuenta:
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